La avances sociales no dejan de sorprendernos en el campo de la política y la administración pública. Conceptos como e-Government, e-Democracy, Open Government evolucionan y se transforman a velocidades frenéticas.
Cuando en algunas partes del mundo, estamos empezando a racionalizar el nuevo concepto de Gobierno Abierto, en otros lugares ya evolucionan tendencias más vanguardistas en la concepción de la democracia.
Este es el caso del término We-Gov abreviatura de We Government. Es un vocablo, por cierto, muy relacionado con las nuevas formas de interrelación social conocidas como Coworking y Crowdsourcing, trabajo cooperativo y colaboración abierta distribuida, respectivamente.
El We-gov lo podemos encontrar definido en TECHPRESIDENT : ¨WeGov es lo que pasa cuando los ciudadanos y los principales actores sociales toman ventaja al Estado, en el uso de la tecnología para crear (y, a veces co-crear, con la participación del gobierno) nuevos y mejores enfoques para el suministro y uso de la información y los servicios públicos fundamentales ¨.
En definitiva, por que esperar a que el gobierno o la administración pública implemente estrategias y soluciones tecnológicas, cuando en realidad, estas deben nacer del seno de la sociedad civil. Deben ser cocreadas y generadas desde el consenso de los principales actores sociales y no impuestas desde las instituciones públicas.
Esta tendencia encuentra uno de sus focos primigenios en La Sala de Maquinas. Un espacio donde compartir conocimiento, investigaciones y propuestas que nacen desde la ciudadanía para ser implementadas en la búsqueda del bien común y de la mejora de calidad Democrática. The Engine Room, a su vez, emana de un proyecto de investigación llamado ¨The Tahrir Data Project¨ vinculado al análisis de las redes sociales en el entorno de la revolución egipcia.
También podemos encontrar We Goverment en interesantes y reveladoras investigaciones académicas como la propuesta por Dennis Linders, de la Universidad de Marylan, en su trabajo ¨From e-government to we-government: Defining a typology for citizen coproduction in the age of social media¨. Linders profundiza en el rol fundamental de los ciudadanos y actores sociales en la cocreación de soluciones y otorga al Estado un simple pero fundamental papel como facilitador.
Y todo esto, sin duda, no acaba más que empezar. Los modelos políticos democráticos actuales se tanbalean, la confiaza ciudadana en la clase política está en declive y el interés de la ciudadanía por la política no para de crecer. En que derivarán estas tendencias, está por ver. Lo que si es seguro, es que los ciudadanos no van a parar de sorprender y asombrar a los políticos, que si no transforman su visión y su misión en la sociedad, están abocados a la más absoluta extinción. Como los dinosaurios.
Juan Manuel Roa
Politólogo